Resulta singular pasear a primera hora por estas calles, y percibir esa sensación tan especial de saber lo distinto, lo emotivo que será todo dentro de una semana.
El miércoles de la semana que viene, mas temprano si cabe que otros años, porque la Misa de Romeros tendrá lugar a las 7:30 horas, habremos dejado atrás otra noche de tension contenida, de nervios a flor de piel, porque otro año van a salir las carretas.
Y son afortunados quienes pueden vivirlo de nuevo.
Hoy, como decimos cada año, toma cuerpo la sevillana que canta “cuando falta una semana p’a salir de romeria”
Hoy puedes ver carros aparcados en calles, con sus adornos a falta de terminar. Hoy puedes ir al sorteo de carretas. Hoy puedes comprobar los trajines de cada casa, entre volantes, sombreros, y demás preparativos para que nada falte. Hoy puedes sumergirte en las conversaciones de veteranos que te cuentan Rocios en blanco y negro, caminos eternos y rocieros que ya no están. Hoy puedes hacerte mil y una ilusiones de tu camino, que siempre es el mismo y jamás es igual. Hoy puedes añorar, recordar, y dejar escapar una lagrima si te falta alquien o si no puedes ir. Pero la Virgen lo sabe todo y estará a tu lado en tu casa y en las arenas.
Hoy puedes sonreir. La Virgen sigue aguardando a que dentro de una semana comencemos a caminar.
Faltan siete días. Viva la Virgen del Rocio.
