domingo, 25 de mayo de 2008

Mas o Menos

Esta semana podian verse en los informativos televisivos los diversos balances que, desde las autoridades, se hacen del dispositivo de organizacion que se ha desplegado para la Romeria, tanto por los caminos como en la propia Aldea.

Se han ofrecido diversos datos, como los de consumo de agua y recogida de basuras, que han sido superiores a los de la Romeria de 2007. Se ha reducido el número de incidencias e intervenciones de autoridades. Asismismo, se propone extender el operativo, de cara a proximas romerias, al fin de semana anterior a la misma, al constatarse que la Aldea recibe a muchas personas que llegn con esa antelacion al Rocio.

Todo esto me lleva a darle vueltas al famoso debate de esta Romeria, que en el fondo es la pregunta topica de todos los años ¿ha habido mas o menos gente en el Rocio?

Es una cuestion sin respuesta exacta, de modo que me dejo llevar por mi personal y sencilla apreciación de lo que he podido percibir.

Puede afirmarse, sin exageraciones desde luego, que algo menos de gente si que ha habido en esta Romeria. Nada mas. No proceden alarmismos ni sesudas valoraciones. Quien lleve algo de tiempo viviendo el Rocio, como ocurre con otras celebraciones, es perfectamente consciente de que estan sometidas a movimientos ondulatorios y picos de alto y bajo, sin mayor trascendencia.

Porque decir que ha habido menos gente esta ademas lleno de matices. El Rocio esta consolidado como la mayor Romeria de España, de Europa y del mundo. Su expansion religiosa esta fuera de duda. Ello no obsta a que las circunstancias sociales y economicas hagan puntualmente que crezca o decrezca la asistencia, sin olvidar que hay quienes se dejan llevar por mal entendidas modas, que siempre son pasajeras, y, digamoslo claro, y no sientes esto, si algo no te llama al corazón, seguramente no vuelvas.

Pero hay que considerar mas aspectos. El Rocio esta ultrarregulado, y eso se nota en el fluir de calles y comitivas. Antes una hermandad llegaba entre un caos de carretas y tractores. Hoy se deja via libre a carretas, animales y peregrinos, tratando de desviar en la medida de lo posible a la traccion mecanica, lo que da una sensancion de mayor tranquilidad y menor agobio.

Asimismo, la entrada a la Aldea en vehiculo esta muy limitada por pases, barreras y dispositivos, al igual que el acceso a los caminos. Todo ello genera otra sensación de fluidez frente a años pasados.

Eso si, he tenido la sensacion de que el Lunes de Pentecostés ha habido, sin duda, muchisima mas gente viendo a la Santisima Virgen. Quien no haya podido venir completamente al Rocio, desde luego no ha faltado a su cita con la Señora. Porque, señores, quienes quieren sacar la fe de todo esto andan errados.

Es mas, otros años el Lunes se convertia en un exodo de romeros hacia sus lugares de origen, y en cambio este año me parecio apreciar mucho mas viva la Aldea durante todo el dia.

No quiero concluir estas impresiones sin añadir un matiz. He visto muchisimos niños, muchisimos jovenes, toda una garantía de pervivencia, que aprenden a ser rocieros desde que empiezan a tener conciencia de su fe. El ejemplo de un padre, madre, o de unos abuelos yendo de la mano a ver a la Virgen, no tiene precio.

Y a todo esto, la Ermita (me falta aun acostumbrarme a lo de Santuario) estaba rebosante a cualquier hora en que pudieras acercarte a ver la Virgen, emocionandote esa estampa de caballistas pasando por la puerta y descubriendose ante Ella.

En suma, que nadie se esfuerce en contar romeros o devotos. Unos años habra mas, otros, como este, habra menos. Pero la fuerza del movimiento rociero se ha consolidado de forma exponencial, y tiene las bases y el valor para crecer en elementos de fe, formacion y caridad de modo continuado no solo por España, sino por todo el mundo.