lunes, 28 de abril de 2008

Culmina el Triduo


En la tarde de ayer, a las 20:30 horas de un espléndido domingo, culminaban los cultos de la Hermandad del Rocío de Umbrete con la Solemne Función Principal de Instituto.

En la imagen podeis ver el altar de cultos, que lucía sobre el majestuoso retablo. La iglesia estaba abarrotada de hermanos, en una celebración de la eucaristía que estuvo acompañada por los maravillosos sones del Coro de la Hermandad del Rocío de Gines.

Fue una tarde entrañable a la hora de ser recibidos los nuevos hermanos, donde los padres portaban a los pequeños para que el párroco les impusiera la medalla, su medalla, la que les acompanará toda su vida por los caminos, en el símbolo de la mejor herencia que pasa de generación en generación: la fe cristiana y la devoción rociera.

Todo terminó con la Salve y los deseos por el sacerdote de un buen camino.

Sigue faltando menos, hermanos.