lunes, 6 de mayo de 2013

Doce horas de Rocio por Almonte



Sobre las nueve menos veinte de la mañana los almonteños tomaron en sus hombros a la Virgen. Y ahi comenzó un recorrido de casi doce horas por su pueblo. La Señora de Rocío, con sus galas de Reina, portó en uno de sus varales dos lazos, uno blanco y uno negro, en recuerdo del luctuoso suceso vivido en Almonte y que ha costado la vida a un padre y su hija.

Con estimaciones de que casi medio millón de personas visitaron el pueblo, la Virgen se paseó triunfal entre todos los devotos, que la acompañaron hasta las ocho y veinte de la tarde, en que volvía de nuevo a la Parroquia, momento que podeis ver en la imagen, tras pasar por esa verdadera catedral efímera que se monta en la Plaza, y donde aun tenía sobre el techo de su paso parte de los cientos y cientos de pétalos que llovieron sobre la Madre de Dios durante ese día.

Fue el colofón a un día glorioso, y antesala de otro fin de semana inmensamente especial, cuando, el día 12 de Mayo, la Virgen, de Pastora, vuelva a su Aldea.